CONCLUSIONES

A partir de la observación participante, los datos arrojados por la tabulación de la encuesta aplicada a los estudiantes y los encuentros de diálogo reflexivo con los educandos y padres de familia, pude establecer hasta ahora lo siguiente:

1. Que si bien es cierto que al padre de familia le interesa el estudio de su hijo, también es cierto, que es una posición pasiva que conllevó y está generando desmotivación, porque el infante se siente solo en su proceso educativo y formativo.

2. Que por cada seis estudiantes cuatro están sufriendo de maltrato infantil, con mayor incidencia en el maltrato físico y emocional (según la clasificación en el Marco Teórico) con presencia de moretones por los castigos. Este sometimiento parece ser un factor importante en el desorden, en ciertos patrones conductuales agresivos y con bajos niveles ostensibles de tolerancia en el hogar como en el aula de clase. En lo que falta de la investigación, ahondaré para precisar con más argumentos contundentes y fehacientes en este postulado.

3. Según los datos recogidos en la encuesta, en la pregunta tres, las actitudes poco asertivas por parte de los padres de familia en los talleres a la luz de la cuarta hipótesis, establezco que efectivamente las actitudes y acciones que segregan al dialogo, está imposibilitando un ambiente sano familiar para que desde unos altos niveles de motivación y de estado emocional se pueda garantizar los Derechos de los niños y niñas.